Fuente: www.wikipedia.com
El aluvión de Antofagasta de 1991, ocurrido en la madrugada del 18 de junio, fue uno de los desastres más violentos que azotó a Antofagasta, ubicada en medio del desierto de Atacama, uno de los más áridos del mundo, dejando como resultado 91 víctimas fatales y 16 desaparecidos. Los seis aluviones fueron producto de una sorpresiva e inusual lluvia torrencial.
En Antofagasta, cerca de las 20 horas comenzaron a aparecer ráfagas de viento, originando marejadas que obligaron a cerrar el puerto para embarcaciones menores.
Pasada la medianoche comenzó a manifestarse una neblina que las 00:30 horas del día 18 se transformó en densa garúa, acompañada por fuertes vientos que continuarían hasta el término de la lluvia.
A las 01:00 la garúa se había transformado en lluvia intensa. A esa hora se habían registrado 0,5 mm de agua caída. Aproximadamente a las 03:00 de la madrugada la lluvia tuvo un nuevo aumento de intensidad.
La madrugada del 18 de junio alrededor de las 3 de la madrugada se inició una lluvia torrencial que duró aproximadamente tres horas, período en el que se registraron 45 mm de agua caída en Antofagasta y de 52 mm en Taltal.
Dada la magnitud de las precipitaciones y las características del suelo con casi nula absorción se produjo un fenómeno de captación de agua hacia las distintas quebradas con arrastre de barro en cantidades enormes y que se convirtieron en verdaderos ríos en que la altura en algunos lugares superó los 2 m.
La fuerza con que el aluvión descendió a la ciudad significó el arrastre de rocas, arbustos y luego todo lo que se opuso en su trayectoria: personas, vehículos y casas. Esto derivó en una gran cantidad de muertos, heridos, desaparecidos y damnificados, con pérdidas materiales de USD$ 70.000.000.
martes, 30 de marzo de 2010
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